Gracias a todos/as (infinitas) por apoyar a esta Oveja Roja.
Algo (de lo mucho) que he ido aprendiendo de Alfonso Serrano
–compañero, amigo y editor– es que, en la producción de esos objetos
táctiles como este que os está llegando, intervienen también (en
desiguales y variadas circunstancias de trabajo, precariedad o
explotación) conductores de reparto, entintadores, impresores, operarios
de prensado, descortezadores, almacenistas, químicos, topógrafos,
blanqueadores, operarios de grúa, campesinos, libreros, administrativos, empaquetadores y carteros.
Y que aquello de 'emisor y receptor' (o 'escritor y lector') que un día nos contaron... no resulta tan simple.
O como el mismo Alfonso dice (al describir el 'ahora' de nuestra
Oveja): “habitamos todas las incertidumbres de una vida librera en caída
libre y una sola certeza: siempre fabricaremos libros”.